¡¡KIKO VUELVE A CASA!! 



¡¡Hola a todos!!

Hoy os presento a Kiko. Está claro que muchos no lo conocéis (sólo mis antiguos seguidores de IG). Bueno, os cuento más sobre él.

Lo recogí en Octubre del 2016 cuando estaba a punto de ir a una Protectora de Animales. Yo andaba buscando un animal a poder ser que no fuera cachorro y que hiciera sus necesidades fuera de casa, ya que por mi trabajo no me apetecía tener continuamente como hace meses tenía, echa un desastre (tengo una perrita de cuatro meses).

Contacté a una ex compañera de clase que era quien lo regalaba. No era un perro suyo sino que era callejero y un día se metió en su jardín para no mojarse de las tormentas que hubieron. Lo tuvo cerca de un año para buscarle dueño y sin haberlo encontrado entonces decidió llevarlo a la Protectora hasta que vi el post en facebook y entré en acción. Me puse en contacto con ella y al cabo de los días Kiko era oficialmente mi mascota. He de decir que fue duro, muy duro. Yo no sé las calamidades que sufrió ese animal estando en la calle, pero se le notaba siempre muy nervioso y miedoso. Escuchaba cualquier ruido y se escondía. Cuando lo sacaba a la calle temía de los coches y de las personas que querían acariciarlo, desconfiaba de todos. Después de pasar quince días pensé en llevarlo a la protectora pero rápidamente se me fue esa idea después de que el animal se reconfortó y se hizo un perro de provecho.
Todo el mundo lo conocía por el perro escapista ya que nadie lo podía coger, no había coche que se le resistiese pero aún así volvía. Después de ese tiempo que estuvo tuve que dejar el piso donde vivía, necesitaba escapar (en otros post cuanto esta historia), y decidí llevar a mi can a la huerta de mi ex vecino, él se hizo cargo de su manutención y gastos mientras yo me comprometía en cambiar mi vida.

Él se hizo muy bien a su nueva casa y decidimos que se quedaría para siempre en la huerta, por eso me extrañó muchísimo lo que pasó.
Llevaba tiempo sin hablar con mi ex vecino y un día tomando un café en una cafetería me encuentro a Kiko, solo y perdido. Lo vi enseguida y se puso hiper contento, lo agarré con la cadena de Duna y me lo llevé a casa. Lo desparasité, le di de comer y pronto empezó a recuperarse otra vez.
Ahora ya no se me ocurre volver a dejarlo. Estaba muy lejos y aún con su instinto se recorrió unos cuantos kilómetros para buscarme. Estoy feliz por haber encontrado a mi machote, es un gran perro sin duda.

Comentarios

Entradas populares